La oclusión dental se refiere a la correcta relación entre las piezas dentarias superiores e inferiores al cerrar la boca. Cuando hablamos de maloclusión dental, nos referimos a la alteración de esta correlación entre los dientes. ¿Cuáles son las razones detrás de esto? ¿Existen tratamientos viables y maneras de prevenirlo? Explorando la Maloclusión Dental: La maloclusión dental, conocida coloquialmente como
La Candidiasis Oral. La candidiasis oral se produce cuando el hongo cándida se multiplica en exceso en la boca. Aunque la cándida es un microorganismo normal en la cavidad oral, diversos factores pueden desencadenar su proliferación descontrolada, dando lugar a síntomas incómodos. Esta afección suele manifestarse mediante la aparición de placas blancas en la lengua o en el interior de
10 señales de alerta. La salud bucal es un aspecto fundamental de nuestro bienestar general. Sin embargo, a veces pasamos por alto problemas como la gingivitis, una enfermedad de las encías que, si no se trata a tiempo, puede llevar a complicaciones más graves, como la periodontitis. La buena noticia es que la gingivitis es reversible si se detecta a
Visitas regulares al dentista. La clave para una salud bucal óptima es mantener visitas regulares al odontólogo, no solo en situaciones de emergencia. Descubre por qué y cuál es la frecuencia adecuada: Los expertos aconsejan programar consultas dentales de 1 a 2 veces al año, si tienes una salud bucal adecuada. En casos contrarios, las visitas pueden ser más frecuentes,
En verano precaución con los pequeños aventureros. Sabemos que las caídas pueden ocurrir, pero si tu hijo se rompe un diente, no te preocupes. Aunque parezca impactante, es menos grave de lo que parece. Por lo general, los dientes que más se dañan son las «paletas», así que mantén la calma. Si la rotura es total, primero toma el diente
A partir de los 6 años podemos detectar problemas en el desarrollo de los maxilares. La Dra. Rosa María Ardila y la Dra. Paula Lammers, especialistas en ortodoncia aconsejan que las visitas en la infancia deben comenzar alrededor de los 6 años de edad, cuando la mayoría de los niños tienen suficientes dientes permanentes para que se pueda evaluar la